domingo, 23 de julio de 2006

La voz del silencio...




"Hay palabras que no nacen del hambre de decir,
sino de la necesidad de mentir
o de las ganas de joder la paciencia.
Quizá por eso el hambre de decir prefiere, a veces,
comer callando."
Eduardo Galeano.
Cuando la vida te hace pensar en el silencio...
En México, la aurora del siglo XXI que se resiste a presentarse sin escándalos y atropellos se ha visto marcada por una significación particular del silencio.
Este objeto discursivo realiza uno de los papeles de mayor importancia en el escenario de la vida política nacional.
Se instaura, se rompe o diluye y la posibilidad de que vuelva a presentarse genera incógnitas difíciles de despejar.A lo largo de los años de acción del Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN), que emergió al escenario político-militar en el año cuatro de la última década del siglo pasado, se han presentado de manera reiterada periodos de silencio que contrastan con la difusión que se le ha prodigado en los medios de comunicación masiva (MCM), prioritariamente la prensa escrita. A los momentos de diálogo y negociación que se han suscitado entre este movimiento y el gobierno, se vinculan acciones, que hoy son materia prima para cualquier análisis en torno a este acontecimiento social, histórico y cultural que dio una nueva fisonomía a este país.
En el documento, "a los de arriba" se les describe a partir de un conjunto de máscaras que utilizan para ocultar el silencio: 1. La de la modernidad, que oculta el rostro de una economía empobrecida de los marginados y que la economía política se achica ante el capital financiero que autoriza guerras, quiebras, dictaduras, etc.; 2. La de la reconversión industrial, que disimula la verdadera campaña de exterminio en contra de los sostenes fundamentales de la soberanía nacional; 3. La de macroeconomía; 4. La del chauvinismo, que esconde la destrucción de la nación que lleva a cabo el gobierno contra los indígenas y contra los observadores extranjeros; y 5. La de la objetividad intelectual. La máscara constituye una imagen. "Faltos de la legitimidad que sólo se obtiene de los gobernados, estos personajes de la tragedia mexicana de fin de siglo la suplen con una máscara hecha ex profeso, la del Estado de Derecho". La ocultación tiende a la transfiguración, a facilitar el traspaso de lo que es a lo que se quiere ser. Sin embargo, no siempre se logra: "la máscara de la modernidad mexicana se descascara cada vez. Y cada vez es más difícil no ver lo que oculta". "Oculta un modelo económico que ha sido impuesto desde principios de la década de los ochenta". ¿Para quiénes? Para el sistema político mexicano: "Piensa que ya sólo una máscara podrá salvarlo y llevarlo vivo (aunque ya no sano y completo) a la otra orilla de este siglo: La Máscara de la Guerra".¿Cuál es la relación entre máscaras y silencios? Los de arriba también son los encargados de distribuir bajo la apariencia de consumo gratuito "grandes cantidades de máscaras y silencios para los de abajo".
Estas ofertas encubiertas se reproducen en máscaras de anonimato, apatía, individualismo, aislamiento, cinismo, etc., las cuales por designación natural se acompañan de rencor, impotencia, avasallamiento, desesperación, soledad, resignación, rabia.
"Nuevas formas de lucha van creando sus propias máscaras y van forjando sus silencios", es decir, se construyen representaciones que propician el ocultamiento de los propósitos de los sujetos.
Silencios y máscaras son símbolos que evidencian que el discurso del silencio se refiere a un mundo representado, capaz de referir al interlocutor cosas distintas de él mismo.
"Sí, un pasamontañas, la máscara que devela el silencio que habla".
M. Pécheux señala que los procesos discursivos se realizan por los sujetos, pero que éstos no tienen su origen en ellos. Al hablar el sujeto, se divide.
Sus palabras son también las palabras de los otros, de lo cual resulta una relación dinámica entre identidad y alteridad, un movimiento que distingue y al mismo tiempo integra, demarcando al sujeto en su relación con el otro.
Por ejemplo, "los de abajo", "hombres y mujeres de máscaras y silencios construyeron su nave... ¡en medio de la montaña!"
Son muchas las connotaciones que la palabra silencio en términos generales conlleva; entre las que más destacan en el discurso de la vida cotidiana están: falta de ruido, abstención de hablar, es decir, de comunicación verbal y circunstancia de no haber ningún sonido en un lugar y en un momento. También es posible asociarlo con manifestaciones de carácter cultural, que se traducen en distintas formas de usarlo. De las diversas manifestaciones del silencio, en este análisis sólo se presta atención a aquel que significa en sí mismo, al silencio como dimensión excluida de la dimensión verbal, que significa, comunica y es parte de la retórica de dominación.En el documento analizado se evidencia: a) que los sujetos, diferenciados por sus lugares sociales, ejercen -como estrategia del discurso político- el silencio, cada uno con fines diferentes, pero señalando a través de él datos y rasgos de sí mismo, pero también de sus interlocutores; b) el silencio no habla, pero no existe sin la palabra; el silencio es, él significa que la situación no referida no puede proyectarse en la estructura de un discurso verbal; propicia y renueva el asombro ante el mundo. En la dinámica del discurso político del EZLN, suelen presentarse situaciones como: 1) el silencio emerge de manera alterna a la palabra; ésta lo interrumpe y después se cobija en él cuando cesa; 2) el silencio suplanta a la palabra y toma la función significativa que ésta tendría si fuera pronunciada; 3) el silencio se transforma en cómplice, los interlocutores no requieren de palabras para acceder a lo que requieren conocer; 4) el silencio reprueba y condena la acción del gobierno mexicano, pero también otorga un voto de confianza a la sociedad civil; y 5) el silencio señala la angustia de la espera, además significa la proximidad de la sorpresa.

Por Dalia Ruiz

Fotos: Montse Balcorta

"El ruido explosivo del silencio..."/"Sálvenlo!"

Marcha de Color vs Minera San Xavier

San Luis Potosí, SLP.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

En el 94, mi familia perdio todo a causa del TLC, sin embargo hoy 12 años despues ellos ya lo olvidaron, yo todavia no.
Tienes la pagina repletita de verdades¡

Feministas Anónimas dijo...

Hola! Gracias por tu visita... tu blog se nos hace muy interesante, y por lo que vemos, también eres muy buena fotógrafa.
Kisses!

Memoriaz de Corazón dijo...

Mariana, muchas gracias por plasmar tu coomentario en memoriaz. Fijate que no es fácil olvidar, uno dijo que hay que saber archivar... pero cuando se trata de olvidar los abusos de un aparato de estado, tan complejo, dañino e irreversible, pues no es fácil. Nunca lo olvides!, es mal consejo pero, la memoria y conciencia histórica nos hace despertar ante injusticias. Te mando un abrazo desde San Luis Potosí, México, sígueme visitando! un abrazo, chau.